Tarta de hojaldre con kiwi y frutos rojos

 

La semana pasada compré unos kiwis, pero aún estaban un pelín verdes, por lo que los dejé un par de días a temperatura ambiente antes de utilizarlos. Los compré precisamente para hacer esta tarta o tartaleta que, cosas que pasan, me apeteció hacer de repente, para no hacer siempre la típica tarta de manzana, eso sí, lleva su crema pastelera aromatizada con vainilla, para contrarrestar la acidez del kiwi y de los frutos rojos.
En cuanto a estos últimos, eran unos congelados que tenía para gastar: frambuesas, moras, arándanos y grosellas. Vosotros podéis utilizar los que más os gusten o tengáis a mano, tanto frescos como congelados. Para descongelarlos, yo lo que hago es ponerlos en un plato o recipiente con una lámina de papel de cocina absorbente para que vaya absorbiendo el agua a medida que se van descongelando los frutos, así no se me quedan deshechos.

En cuanto a los kiwis, he utilizado la variedad verde, pero si os gustan más los amarillos, podéis utilizarlos también, o incluso, una mezcla de ambos.
Para finalizar, el toque brillante se lo dí con un preparado de cobertura que suelo comprar en Lidl y que se prepara con agua o zumo de frutas y azúcar, se calienta y termina gelatinizando. Pero podéis utilizar simplemente alguna mermelada de color claro, tipo ciruela, albaricoque o melocotón, y quedará de vicio.

Este es el preparado que compro en Lidl, viene en paquetes de 10 sobres

Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre rectangular (fresco o descongelado)
- 250 ml de leche
- 25 gramos de maicena
- 1 huevo
- 1 cucharadita de azúcar vainillado (o esencia de vainilla)
- 50 gramos de azúcar blanco
- 3 o 4 kiwis
- Frutos rojos al gusto
- Para terminar: mermelada o preparado para cobertura de tartas

Elaboración:
1. Antes que nada, empezaremos preparando la crema pastelera para que esté fría, o por lo menos, templada. Para ello, vamos a hacerlo de forma rápida y fácil: mezclamos la leche, la maicena, el huevo batido (reservamos una cucharada para pintar el hojaldre), el azúcar vainillado o esencia de vainilla (o el interior raspado de una vaina de vainilla natural) y el azúcar y lo mezclamos muy bien con ayuda de unas varillas.
2. Lo llevamos al fuego en un cazo y lo dejamos que se haga a fuego medio, sin dejar de remover, hasta que espese y se forme la crema. Si queréis verlo más detalladamente, en mi canal de Youtube tengo la receta de los buñuelos de viento rellenos de crema pastelera. En la primera parte del video podréis ver esta forma de hacer la crema de manera fácil y rápida.
3. Una vez hecha la crema, la pasamos a un recipiente para que se vaya enfriando, y lo cubrimos con film de plástico transparente tocando la superficie de la crema, para que no se forme "costra", es decir, que no se seque. Reservamos para después.
4. Ahora, precalentamos el horno a 200º C, con calor arriba y abajo. Desenrollamos el hojaldre y pinchamos la superficie con un tenedor, dejando sin pinchar un borde todo alrededor de unos 2 cm.
5. Pintamos el hojaldre con la cucharada de huevo batido que habíamos reservado, con ayuda de una brocha de repostería, y lo metemos al horno unos 20 minutos, hasta que esté doradito.
6. Lo sacamos y lo dejamos enfriar. Si se ha hinchado por algún lado podemos aplastar un poquito la burbuja pero sin hacer mucha fuerza, para que no se nos rompa el hojaldre.
7. Cuando ya esté todo a temperatura ambiente (hojaldre y crema), empezamos a repartir la crema pastelera por encima del hojaldre con ayuda de una espátula, dejando sin cubrir el borde que habíamos dejado sin pinchar con el tenedor.
8. Ahora pelamos los kiwis, los cortamos en rodajas y cada rodaja en dos mitades y las vamos colocando de forma superpuesta. Repartimos los frutos rojos, ya descongelados, por entre medias de los kiwis.
9. Finalmente, hacemos la cobertura siguiendo las instrucciones del fabricante, o bien lo pincelamos con la mermelada. Quedará todo muy brillante y delicioso, tenéis que probarlo!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Imprimir